Es frecuente encontrar problemas de conducta en personas con CI límite. Entre ellos podemos destacar dificultades para controlar conductas no deseadas tales como la agresividad, la incapacidad de retrasar las gratificaciones, problemas relacionados con su conducta sexual, descontrol en las comidas…
Otros problemas destacables serían aquellos que tienen que ver con las relaciones sociales, hacer amigos, mantenerlos, saber decir que no a determinadas proposiciones, adquisición de hábitos de higiene personal, gestionar el tiempo, planificar sus actividades y un largo etcétera relacionado con la adquisición de una autonomía saludable.
La adaptación de estas personas no es fácil, ya que se suelen mostrar inflexibles y se niegan a aceptar cambios, por lo general les asusta lo nuevo y todo aquello que no controlan.
En Betania trabajamos para que estas personas desarrollen estrategias y habilidades que les faciliten su adaptación y ajuste social, incidiendo en las áreas que cada persona necesita mejorar o reforzar y valiéndonos de aquellas habilidades estrella que cada uno posee.